Hay varias expresiones que denotan la importancia de los pies. Por ejemplo, se dice que las personas sensatas tienen “los pies en la tierra;” Cuando alguien no desea hacer algo se dice que “no se quiere mojar los pies“ .
En primer lugar, trátelos bien. Haga una observación meticulosa de sus pies con regularidad, o pida a un familiar que lo haga. Los podólogos y médicos de atención primaria (médicos generales y de cabecera) están capacitados para tratar la mayoría de los problemas de los pies.
A veces es necesario contar con los conocimientos especiales de un cirujano ortopédico o de un dermatólogo.
Mantener una buena circulación sanguínea hacia los pies también ayuda, lo cual se logra elevando éstos cuando se está sentado o acostado, haciendo estiramientos, si ha estado sentado por largo rato, caminando, haciéndose un suave masaje o introduciéndolos durante un rato en agua tibia.
Trate de evitar la presión de los zapatos que le queden ajustados y de no exponer sus pies a temperaturas frías. No se siente por largos períodos de tiempo (especialmente con las piernas cruzadas).
Unos pies bien cuidados es símbolo de persona sana y cuidadosa con sí misma.
Denotan atención por el aspecto personal.
Siendo el pie lo más alejado del centro del cuerpo, si se ven bien cuidados es seguridad de atención, salud y belleza.
Los pies siempre han tenido un rol muy importante en la sensualidad. Escritores, poetas y pintores han alabado a los pies bien cuidados.
Por salud, por estética, por comodidad, por sensualidad, los pies han de ser una parte del cuerpo a tratar con extrema delicadeza. Las piernas, y por lo tanto los pies, son quienes nos acercan a lo que deseamos, junto a la palabra y los gestos son esenciales en una vida social.
0 comentarios
Publicar un comentario